- Realidades – No. 631 – Marzo 17 de 2018
- Editorial
Esta semana se ha vuelto a tratar en medios de comunicación y en redes sociales el tema de la nacionalidad de Nicolás Maduro.
El ex presidente Andrés Pastrana publicó un trino que dice: “Siempre llamo a Nicolás Maduro ‘paisano’ porque su madre, Teresa de Jesús Moros, era ciudadana colombiana y por tanto él también lo es, sin importar dónde haya nacido. Artículo 96 Inciso 1A de la Constitución Política de Colombia”. El ex vicepresidente Francisco Santos también publicó un trino en el mismo sentido, que dice: “Nicolás Maduro, el paisano colombiano hijo de madre colombiana acabó con Venezuela y pretende lo mismo con Colombia. Pues acá no podrá lograrlo”.
Esto se da en momentos en que la situación en Venezuela está a punto de explotar. Varios militares, incluso algunos coroneles, han sido detenidos por traición a la Patria junto con el ex ministro del Interior, Miguel Rodríguez Torres. La prensa nacional e internacional ha registrado estos hechos como el inicio de un levantamiento militar.
La situación en el vecino país no tiene antecedentes. La inflación en 2017 alcanzó el 2.600%, mientras que el acumulado anual a febrero pasado llegó al 6.000%. Algunos analistas opinan que para 2018 la inflación podría llegar al 11.000%. Solamente el 21% de los venezolanos afirman que les alcanzan los ingresos para comer. Un rollo de papel higiénico cuesta 200 mil bolívares. Increíble que eso suceda en el país más rico de Suramérica.
La única salida para el país es terminar con la aventura socialista, lo cual hoy solo se podría lograr si las Fuerzas Armadas le retiran el apoyo a Maduro, con los dos argumentos mencionados: la inconstitucionalidad de su presidencia por su nacionalidad colombiana, y el hecho de tener al 80% de la gente aguantando hambre.
Por otra parte, en Colombia, el domingo pasado se obtuvieron resultados concluyentes en las consultas internas de los partidos. Los tres precandidatos de la derecha obtuvieron seis millones de votos, a pesar de ridículo error de la Registraduría por la falta de tarjetones, que ha generado todo tipo de burlas en las redes sociales. En cambio, los dos candidatos de la izquierda obtuvieron menos de tres millones y medio de votos, lo que hace pensar que las opciones del candidato Petro son muy pocas. Mucha gente recuerda las declaraciones de Petro cuando dijo: “Y si queremos una democracia profunda en nuestro país, pretendemos construir en Colombia una imitación de la Venezuela actual”. Recientemente, él concedió a la periodista de La W Vicky Dávila una entrevista en la cual explica su estrategia política sobre la propiedad privada, si llega a la presidencia: se propone aumentar hasta el techo el valor de los impuestos prediales de lo que él llama ‘tierra improductiva’ hasta que la gente ya no esté en capacidad de pagarlos, para obligarlos a vender a bajo precio. Luego, como no habrá compradores para todo lo que saldrá a la venta, será el Estado el que aprovechará y comprará todo. Por supuesto, el Estado será el que califique la condición de productividad de la tierra, con lo que podrá quedarse con los predios que quiera.
Las jornadas electorales que vienen en Colombia serán definitivas para el destino del país. Aunque hoy parece muy poco probable que el modelo socialista se imponga, todavía existe un grave riesgo, porque no se sabe cómo van a quedar las cosas luego de las alianzas que se presentarán antes de la primera vuelta. Hasta el partido de las Farc hará propuestas de alianza a otros. Claro que con los 80 mil voticos que obtuvo, es difícil que algún candidato les acepte.